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jueves, 27 de febrero de 2014

RIBS: Una revisita ciertamente decepcionante.

Alguna vez os hemos hablado ya de Ribs y hasta lo hemos hecho confesándonos admiradores de sus costillas, de su parrilla y de sus carnes. Pero este post no va por ese camino y os vamos a contar, como bien reza el título del artículo, lo decepcionante que fue volver a un restaurante de esta marca tan extendida por nuestras calles.

El nuevo reclamo de Ribs.
La aventura comienza al volver a casa después de un evento cultural del que no viene al caso hablar (bueno, vale, era el regreso de nuestro gran amigo Tito Valverde al teatro y había que acompañarle en tan magna fecha), se nos antojó visitar el Ribs situado en la Calle Gregorio Benítez, justo al lado del Centro Comercial Arturo Soria Plaza, donde se ha instaurado un núcleo duro de locales donde comer y beber y por lo tanto, ha aflorado una gran competencia que, pensamos, Ribs no ha sabido gestionar. Pues bien, aunque nos las prometíamos muy felices y sabiendo que "sólo" era lunes, allí que nos plantamos. Tenemos que decir que la decoración tanto exterior como interior es magnífica, emulando un granero típico americano (como muchos otros restaurantes de la marca se han hecho, tiempo después de éste), pero entre la noche y la falta de gente, más bien parecía que nos estábamos adentrando en una mala película de serie B en la que en cualquier momento nos iba a aparecer un zombie o el fantasma de Billy el niño.

A pesar de estos detalles, nos sentamos, ojeamos la carta y comprobamos que han aumentado el número de opciones hamburgueseras de una forma considerable, lo cual nos agradó bastante. Así que, como era algo tarde para comer más y como somos unos profesionales contrastados, nos decantamos por tres hamburguesas, para probar la nueva carta, nada más, ni entrantes, ni postres.

Pues bien, aquí empieza la verdadera odisea, ya que, como hemos dicho antes, a pesar de estar en un local prácticamente vacío y ya que la cocina está expuesta, se puede ver el "trabajo" de los cocineros, vemos que nadie se toma con mucho estrés la que, creemos, era la única comanda en ese momento. Estupefactos, recibimos las bebidas y comentamos estos hechos con voz baja, por miedo a que se nos escuche por todos lados.

Como no os interesan los temas de conversación que tuvimos, mejor os hacemos una elipsis temporal, larga, hasta el momento en el que llegaron nuestros platos y que pasamos a relatar. 

Y las "agraciadas" fueron: la Great Burger, una hamburguesa que, sobre el papel, debería ser espectacular, ya que la forman dos pisos de carne, queso cheddar y salsa barbacoa. A pesar de su sencillez, un plato consistente, pensaréis, pues no. Y es que la carne es tan fina que toda junta sería una hamburguesa sencilla, en las mismas proporciones. Además, el sabor de la misma era bastante soso y echamos de menos algo más de condimento. Por otro lado, el gusto a barbacoa de carbón, del que tanto se presume en la publicidad es inexistente. Aunque no todo está perdido, el queso es bastante sabroso y está fundido en su punto justo.


The great Burger.
El pan es otro cantar, de tipo clásico americano, prácticamente sin tostar, se desmoronó casi sin mirarlo y el plato parecía más el atrezzo de una película de Alien o Despredador que algo comestible.

La siguiente fue The One, una hamburguesa en la que parece que se han gastado más dinero en publicitar que en probarla, ya que adolece de los mismos fallos que la anterior, aunque al ir compuesta por un huevo frito, al menos es bastante más consistente.


The One, acompañada de patatas fritas y ensalada de col.
Sólo añadir que el punto de la carne, tanto en esta burger como en la anterior, no estaba del todo conseguido, ya que, aunque la pedimos poco hecha, la trajeron más bien al punto y mira que no sería porque no tuvieron tiempo para cuidar estos detalles...

Detalle del corte de la carne
No se salvan ni las patatas que acompañan a las burgers, ya que son congeladas, pero ni son crujientes ni destacan por algún valor añadido ¡Si hasta son pocas!

Y por último, una burger que nos produjo sentimientos encontrados: la Guacamole Burger. Tenemos que admitir que el ingrediente principal, el guacamole, estaba bastante logrado y fresco y daba un buen sabor al conjunto del plato, a pesar de haber sido pedida muy hecha, por lo que la salvamos de la quema total de nuestra experiencia.


Guacamole burger.
En conclusión, parece que Ribs ha abandonado a su su suerte uno de los primeros locales de su dilatada historia culinaria y eso se nota mucho tanto en el ánimo del servicio como en algunos detalles de falta de interés en el cuidado del local. Todo eso sumado a una comida de un nivel ciertamente bajo y con una de las peores relaciones calidad/precio que hemos visto nunca, ya que, como veréis más abajo, las hamburguesas no son baratas, precisamente, nos hace pensar que igual deberían empezar a encenderse las alarmas y sus responsables tendrían que tomar las riendas y mejorar el control de calidad, un hecho que publicitan, pero que parece que se queda en las brasas de su parrilla.

PRECIO DE LA VISITA DESGLOSADO:

2 CERVEZAS: 5.60 €
1 COPA DE VINO: 2.75 €
1 GREAT BURGER: 11.99 €
1 THE ONE BURGER: 11.99 €
1 GUACAMOLE BURGER: 8.75 €

TOTAL: 41.81€

PRECIO POR COMENSAL: 13.69 €

Web | www.ribs.es

Podéis encontrar Ribs en la Calle Gregorio Benítez, 4.

martes, 25 de febrero de 2014

THE GOOD BURGER: Un gran híbrido entre el gourmet y el fast-food.

Corrían los rumores de que el Grupo Restalia (creadores de las franquicias de 100 Montaditos y La Sureña) se estaba planteando entrar en el panorama hamburguesero español con una nueva cadena de locales. El secreto se desveló finalmente cuando a finales de 2013 estrenaban el primer local de The Good Burger (TGB) en el madrileño Centro Comercial La Vaguada.

Como estábamos ansiosos de conocer este nuevo concepto de hamburguesería, que intenta combinar unos ingredientes "good" y los precios contenidos a los que Restalia nos tiene acostumbrados, hace un par de semanas nos plantamos por allí. Es el único restaurante que la cadena tiene hasta el momento en Madrid (y cuentan solamente con uno más en Huelva), aunque nos han chivado que próximamente podríamos estar zampando sus hamburguesas en otros locales de la capital más céntricos...

Nada más otear el local nos llevamos una buena sorpresa y es que cada detalle aquí está cuidado. El espacio que tienen es muy grande pero, aún así, logran que sea acogedor combinando los tonos provenzales, verde y negro a la perfección. Además, nos dimos cuenta (a pesar de ser de noche) de que tienen una cubierta de cristal que parece poder desplegarse y que puede hacer las delicias de muchos en las noches de verano, así como dar muchísima luminosidad durante el día.

El ambiente nos evoca aires de hipsterismo molón, un pequeño jardín vertical que acompaña a unos espectaculares murales hechos por Wasted Wheels en la zona del fondo y mesas altas en la entrada que dan pie a compartir hamburguesas y charlas junto a una bicicleta verde que nos enamoró.

Detalles del local de TGB en La Vaguada.
La historia que nos cuentan en TGB es diferente a todo lo que os hayamos podido contar con anterioridad, y es que es un local de comida rápida de los de toda la vida (con una zona de pedido) pero que intenta diferenciarse de ellos en todo lo posible, ofreciendo como detalle que hasta podamos ver cómo se preparan sus hamburguesas en la cocina abierta o que nos den unos cacharritos avisadores de que nuestro pedido esté listo en lugar de hacernos esperar de pie.

Avisadores para que puedas ir a recoger tu pedido.
 En la carta de TGB podemos ver claramente dos reyes: las hamburguesas y los perritos calientes, aunque para aquellos que cuiden más su línea tienen la opción de elegir entre los tres tipos de ensaladas que ofrecen, que vimos que se servían en buenas cantidades.
Las 5 variedades de hamburguesas más los 4 hot dogs.
¡Pero vamos al lío! el concepto hamburguesero de The Good Burger se basa en ofrecer ingredientes de calidad que conformen una buena hamburguesa: carne 100% de vacuno o de cerdo, lechuga Batavia y un panecillo de tipo brioche especialmente confeccionado para la cadena.

¿No le recuerda a nadie a otra cadena de hamburgueserías americana?
Nosotros nos decantamos por probar la más vendida, la TGB Burger con vacuno, queso americano, bacon, lechuga, tomate y salsa TGB ("con un toque agridulce y picante"). Nuevamente, la presentación nos recuerda a aquellas hamburguesas que nos comimos en la sucursal de Shake Shack en Union Square en Nueva York y al dar el primer bocado nos sorprendemos al ver que la carne está perfectamente rosada, ya marcando la diferencia con otras que hayamos podido probar en un fast-food. Quizás el sabor en su conjunto no nos hace pensar en una hamburguesa gourmet a las que ya estamos acostumbrados pero no os vamos a negar que esto tampoco sabe a McDonald's/Burger King y que claramente hay un escalón diferencial.

La lechuga Batavia nos encanta por lo vistosa que queda en estas hamburguesas pero quizás lo que más llegamos a apreciar es el panecillo, que nos convence por ser esponjoso y dulzón, ideal para este tipo de burgers.

TGB Burger en primer plano.
Como nos gusta probarlo todo, también nos zampamos una Pull Pork BBQ. Es ésta quizás la que más nos llamaba la atención de toda la carta y acertamos de pleno porque no hacemos más que pensar en volver a TGB por culpa de esta maldita. Está hecha de carne deshilachada de cerdo, salsa barbacoa y con aros de cebolla, así que ya os podéis imaginar que se deshace casi en la boca, haciendo las delicias de cualquier paladar hamburguesero que se precie. Por favor, ¡no dejéis de probar esta hamburguesa si pasáis por allí!

La Pull Pork BBQ, la gran ganadora de la noche.
Las burgers son pequeñas, así que si vienes con hambre es mejor que pidas un par. No creemos que este sea mayor problema porque los precios de éstas no superan los 3,5€, pudiéndola hacer doble por 1,5€.

Esta vez pecamos y engullimos un par de hot-dogs que, aunque ricos de sabor, se nos antojan algo pequeños y que no llegan a compensar si no hay alguna oferta de por medio. Quizás es que nosotros somos demasiado fans de las hamburguesas...

Como acompañantes tomamos los aros de cebolla con mostaza y miel y las patatas fritas con salsa de queso caliente. Los aros, como podéis ver, son finos y crujientes y, además, vienen servidos en una ración generosa, por lo que pasan a ser uno de nuestros favoritos en TGB. Las patatas fritas vienen cortadas de esta forma tan original (y que tanto nos recuerdan a las de Shake Shack...) y nos parecieron simplemente correctas, aunque ya estamos deseando probar las que llevan queso rallado y hierbas con salsa alioli. Esa montaña de queso nos está llamando a gritos...

Los aros de cebolla bastante ricos aunque quizás con demasiado aceite.

Patatas fritas con salsa de queso caliente.
Para echar todo esto abajo, hay una zona de "refill" de refrescos y las cervezas y tintos de verano se sirven en hermosas jarras, un puntazo desde luego cuando estamos hablando de este tipo de comilonas.

Finalmente, llegamos a los postres y nos decantamos por un frozen yogurt grande con dos toppings (todo muy al estilo Llaollao/Smöy), aunque también se podía tomar helado de vainilla llegando a elegir entre 22 ingredientes diferentes para acompañar. La verdad es que el sabor del yogurt era muy conseguido y la ración bastante generosa. Sin duda, un toque refrescante para acabar una comida de este tipo.

Frozen yogurt de TGB, nada mal.
En definitiva, aunque el Grupo Restalia no ha descubierto ningún continente nuevo al implantar un concepto existente en otros países, ha sabido adaptarse al mercado español y cubrir un hueco que quedaba abierto en esta burbuja de la hamburguesa en la que estamos sumergidos. The Good Burger ha conseguido posicionarse como una alternativa de calidad razonable a un precio imbatible (estad atentos de los descuentazos que tienen, como el 2x1 de los viernes) para aquellos que no quieren rascarse demasiado el bolsillo sin acabar comiendo en un fast-food cualquiera.

Web | www.thegoodburger.com

Puedes encontrar The Good Burger en la zona de restauración del Centro Comercial La Vaguada, en la Avenida Monforte de Lemos 32B

jueves, 20 de febrero de 2014

PECADO CARNAL MAJADAHONDA: El Pecado se expande fuera de la capital.

Que los chicos de Pecado Carnal no paran es una verdad como un templo, por eso no nos extrañamos cuando nos invitaron a conocer su nuevo local en Majadahonda. Es su primer restaurante fuera de Madrid y han hecho la apuesta en esta ciudad a un paso de la capital, así que no podíamos dejar de comprobar que todo sigue igual de bien fuera de sus confines habituales.


Como era de esperar (fuimos al día siguiente a su inauguración), al sitio le quedan muchos toques por dar pero lo que más nos enamoró es que, gracias a su localización en una placita, van a tener una hermosísima terraza que va a hacer las delicias de muchos ahora que la primavera está a la vuelta de la esquina.

Al local le queda aún un poco de trabajo pero la terraza será un puntazo.

En Pecado Carnal siempre nos han tratado de maravilla y ya os lo hemos contado en más de una ocasión, pero esta vez nos quisieron sorprender aún más ofreciéndonos algunas novedades como unas Empanadillas de carne de Kobe, que estaban estudiando poner en la carta y que nos enamoraron a todos los gastroliantes. Desde aquí, les pedimos que las pongan cuanto antes, no sólo porque la carne estaba espectacular, es que la masa de las empanadillas estaba en su punto, crujientes y sabrosas a la misma vez.
Las empanadillas con carne de Kobe que esperamos que pongan en carta.
En esta ocasión también probamos un plato que aún no habíamos tomado, los Tori Karaage, una clara fusión de la cocina japonesa y la americana porque se trata de unos nuggets de pollo tradicionales cocinados según una técnica culinaria japonesa en la que terminan cocinándose al vapor. La verdad es que nos encantaron y la salsa agridulce de ciruelas les quedaban que ni pintados.
Tori Karaage, unos nuggets de pollo cocinados al vapor.
Después pasamos a lo grande y, como grandes fanáticos de las hamburguesas, intentamos probar el máximo posible de ellas e hicimos una buena cata. Así que esta vez nos decidimos por la Truffled Cheese Kobe, la Portobello Kobe, la Wasabi Kobe y una hamburguesa "experimental" (aún sin nombre) que, además de la deliciosa carne de Kobe, llevaba guacamole y pico de gallo. Ya os lo hemos dicho más de una vez, nosotros somos fans del guacamole en las hamburguesas, así que no dudamos ni un sólo momento cuando nos dijeron que estaban pensando en incluir en la carta estos nuevos ingredientes.
Hamburguesa con guacamole y pico de gallo, aún pendiente de testeo.
No os vamos a volver a hablar de lo buenísima que nos parece que está la carne de Wagyu certificada que se ofrece en todos los locales de esta cadena madrileña, pero nuevamente os contamos que nos la volvieron a ofrecer perfectamente cocinada en todas las hamburguesas, por lo que nos resultó tan sabrosa como siempre.

El punto de la carne 100% respetado, poco hecha.
Aunque el tamaño de la hamburguesa sigue siendo de 150 gramos (pudiéndose ampliar hasta 300 gramos por 6,90€, precio que nos parece un tanto exorbitante...), la verdad es que la conjunción con las ricas patatas gajo y los entrantes que habíamos tomado, quedamos más que llenos para ser la hora de la cena.

El panecillo, que estaba maravillosamente tostado, aguantó como un campeón todo lo que la hamburguesa llevaba sin matar ni un ápice del sabor. Aunque no es un pan que sorprenda por su originalidad, nos parece que cumple perfectamente su función en estas hamburguesas, que no se caracterizan por estar sobrecargadas de ingredientes. Y es que, creemos que uno de los puntos fuertes de las burgers de Pecado Carnal es su sencillez, ya que la carne no suele estar acompañada de más de dos ingredientes, que suelen ser de muy buena calidad, dejando al paladar notar el sabor de la carne.

Hamburguesa Wasabi Kobe, con el wasabi al lado para no llevarse sustos.
De los cuatro hamburgueseros que éramos no salió ninguna burger ganadora. Y, aunque la hamburguesa con guacamole nos gustó mucho a todos, las opiniones estaban divididas entre la Truffled Cheese - con queso trufado con trufa negra y boletus y, por tanto, un fuerte sabor a trufa - y la Wasabi Kobe - con mayonesa japonesa y wasabi servido a un lado para los menos amantes del picante.

Truffled Cheese Kobe Burger, nos encanta el sabor a trufa.
La Portobello es una de las más pedidas en Pecado Carnal y por algo muy bueno tiene que ser.
Por si no era bastante, Cristina (la simpatiquísima encargada) nos hizo pecar con dos de sus postres: el Brownie con helado de vainilla bourbon de Madagascar y dos raciones de la New York Cheesecake. Nos contaron que se tratan de postres 100% caseros y después de volver a probarlos, os confirmamos que es así porque estaban espectaculares. El brownie se sirve en una ración más que generosa pero aún así es uno de los mejores que hemos probado, está esponjoso y al mismo tiempo muy jugoso, vamos, ¡de escándalo!

La New York Cheescake casera, muy rica.
La ración de brownie es brutal, además de estar de pecado.

En definitiva, el nuevo Pecado Carnal de Majadahonda, a falta de una decoración adecuada, sigue ofreciendo tanto unas hamburguesas de una calidad suprema como unos platos y postres tan estupendos como siempre. Sin embargo, creemos que los precios son demasiado elevados con respecto a otras hamburgueserías que han ido surgiendo y que nos ofrecen productos de calidad similar, por lo que más les vale vigilar un poco...


Podéis encontrar el nuevo Pecado Carnal en la calle Mina, 14 de Majadahonda

martes, 18 de febrero de 2014

HAMBURGUESA NOSTRA: El mejor regalo para comer bien en casa.

Sí, lo sabemos y sí, no tenemos perdón, pero la verdad es que no tenemos a Hamburguesa Nostra como nuestros lugares más frecuentados, aunque sí que es verdad que algo los hemos probado. Pero todo esto cambió cuando, muy amablemente, nos ofrecieron probar unas de sus cajas regalo, una nueva forma de acercar al cliente estas hamburguesas creadas por Juan Pozuelo y que son un auténtico manjar.

Mosaico con detalles de todo lo que incluye la caja. Presentación de 10.
La caja que probamos fue la de las mini hamburguesas, aunque hay más variedades, como os comentaremos después. Concretamente, este pack contiene 24 mini burgers, a elegir de entre todas sus variedades, con sus 24 panecillos y una salsa que también dejan a nuestra elección; la nuestra era la de mostaza de miel y os adelantamos que está espectacular.

La caja, en todo su esplendor.
Como podéis ver en las imágenes, la presentación es bastante elegante, otorgando un estilo de calidad acorde con la materia prima, que para eso es la protagonista de la caja.

A pesar de que siempre empezamos hablando de la carne en primer lugar, hoy vamos a hacer una excepción y comenzaremos con el pan, ya que es la gran sorpresa de la caja, siendo éste muy muy fresco y blando, ideal para estos pequeños y deliciosos bocados.

Esos panecillos.
De las carnes, poco hay que decir, pequeñas piezas, cada una condimentada de una forma y con identidad propia. Según el propio Juan Pozuelo, ideales para comer sin nada más. Y es que el truco de estas pequeñas hamburguesas (y de sus primas más grandes) es precisamente ése: si se pueden desnudar y comer solas, es que son muy buenas.

Las carnes en crudo, por poco tiempo.
Como nos os queremos aburrir con la inmensa variedad que probamos, os dejamos con una foto del proceso de cocina, ya que ahí puede comenzar el "juego" que se propone y es que se empieza a perder la identificación de cada hamburguesa y luego es muy divertido probar cada una sin saber cuál ha sido tu elección.

¡Menudo cambio!
Y tras este resultado, poco más podemos añadir que no os imaginéis. La carne, muy sabrosa, juega a nuestro favor, aunque hay algunas combinaciones algo arriesgadas, en general es un gusto poder montarse una degustación así en casa. La salsa, como os hemos dicho antes, es deliciosa, aunque también es verdad que le resta mucho protagonismo al conjunto, ya que es un bocado muy pequeño como para poder apreciar todo a la vez.

Un conjunto casi perfecto.
Aún así, en términos generales podemos decir que estas cajas, además de ser un regalo cuasi perfecto, se nos antoja fundamental para casi todo buen hamburguesero que se precie. Así que no dudéis en preguntar por esta o cualquier otra de sus combinaciones, porque realmente quedaréis más que satisfechos.

Os dejamos el link a la web de Hamburguesa Nostra donde podréis ver todas las variedades de carnes y salsas, así como el resto de cajas regalos que ofertan.

Y tú, ¿conocías las burgers de Hamburguesa Nostra?, ¿Te parece buena idea este nuevo formato para llevarlas a casa? Cuéntanos tus experiencias en la sección de comentarios.

jueves, 13 de febrero de 2014

ESPECIAL: Las hamburgueserías que inspiran más amor.

¿Eres un romántico empedernido? ¿estás ahora mismo súper in love y estás que lo tiras? Que sí, que San Valentín (o San Cortinglés, como quieras llamarlo) está a la vuelta de la esquina y el amor se respira en cada rincón de Madrid, así que seguro que estás contando los días para que llegue el 14 de febrero.

Sea como sea, San Valentín o no, hoy venimos con la intención de señalaros los núcleos hamburgueseros que nos inspiran más romanticismo. Ya sabemos que es una tarea difícil - todos conocemos las estridencias de muchas hamburgueserías - pero, de alguna u otra manera, las luces más tenues o una decoración algo cuqui que da lugar a susurros nos han provocado unas intensas ganas amorosas de haceros la siguiente recopilación para que lleves a tu amado churri a zamparse una buena hamburguesa:

Buns: calle López de Hoyos, 11.

No paramos de ir a Buns y ya no es porque estemos obsesionados con nuestra Ole Tus Nachos, es que creemos que su decoración sobria pero a la vez acogedora, sus sofás, sus mantelitos de figuritas y un hilo musical muy charming, nos tiene más que conquistados.

Creemos, sin dudarlo, que es caballo ganador y carne de San Valentín porque además de tener unas hamburguesas para derretirse, sus cócteles dejan inspirados a cualquiera.

Esas luces de Buns son muy amorosas.

Cafetería HD: calle Guzmán El Bueno, 67.

Las mesitas y las sillas de casa de tu abuela mezcladas con esas luces que iluminan más bien poco, el ambiente cool y esa carta de gin-tonics que nos tiene más que enamorados seguro que te van a ayudar a conquistar a más de un@ a base de una de sus hamburguesas.

Fuente: Grupo La Musa.

Pecado Carnal: calle Covarrubias, 24.

Si hay un Pecado Carnal que puede despertar la pasión del otro comensal es el de la calle Covarrubias, en pleno Chamberí. La decoración en tonos rojos y negros sofisticados nos parece que, combinado con una de sus riquísimas hamburguesas regadas en un buen vino, puede traer buenas sorpresas.

Fuente: Restalo.

New York Burger: Paseo de la Castellana, 89.

Pisamos el nuevo New York Burger hace muy poquito y su decoración nos apasionó. Estamos más que seguros de que si llevas a tu pajarit@ a comerse un buen New York Steak o una de sus hamburguesas ahumadas y terminas la velada con uno de sus ricos postres, no va a tener más que rendirse a tus brazos.

Nos encanta la iluminación y decoración del nuevo NY Burger.

La Gamella: calle Alfonso XII, 4.

Si quieres tirar la casa por la ventana o incluso pedirle que sea tu media naranja de por vida con una hamburguesa por delante, ¡éste es tu sitio! No es una hamburguesería propiamente dicha pero una burger rica, un steak tartar y una botella de vino es difícilmente resistible...

Fuente: Kviar.es
¿Quién ha dicho que comerse una hamburguesa no es romántico? ¡Nosotros estamos convencidos de que no se conoce bien a una persona hasta que no has comido una buena burger con ella!

Seguro que se nos ha quedado algún rinconcito del amor hamburguesero en el tintero, ¿a qué estás esperando para desvelar tu secreto con nosotros?

martes, 11 de febrero de 2014

EVENTO: Celebramos el primer aniversario de Goiko Grill

El verano pasado tuvimos la suerte de dar con un nuevo paraíso hamburguesero en Madrid y, desde ese momento, no paramos de recomendar poner un pie en Goiko Grill. Así que no nos lo pensamos ni dos veces cuando nos invitaron a celebrar con ellos el primer aniversario de su apertura en la calle María de Molina, zona que cada vez frecuentamos más los amantes de la hamburguesa ¡y que nos encanta!


Sabíamos que el sarao iba a ser por todo lo alto (de estos venezolano-vascos no podemos esperar algo diferente) pero no nos esperábamos que la cosa iba a ir por los derroteros más creativos y que nos iban a poner manos a la obra... Y es que, nada más llegar, Andoni Goicoechea y su hermana Daniela nos contaron que estaban decididos a que del primer #GoikoAniversario saliese la mejor hamburguesa posible de la cabeza de los asistentes, organizando un divertido mini-concurso que tenía hasta premio.

Durante el picoteo, probamos algunos de los platos de Goiko como los originales Teques, los Nachos de Daniela (¡ay qué guacamole más rico!) o los crujentes Chicken tenders, así como una degustación de la mayoría de sus estupendas hamburguesas (para santo de nuestro devoción la Chipotle también estaba, aunque muchas de ellas no llegaron a nuestro rinconcito...); pero lo más importante es que cada uno de los asistentes tenía su propia cartulina para construir esa hamburguesa perfecta que siempre habías imaginado.

Algunos de los manjares de la noche.
Nosotros diseñamos dos hamburguesas que combinaban todo aquello que más nos gusta: una de ellas con un toque muy mexicano, la Tijuana Connection; y otra llena de carnaza y queso y otros ingredientes de nuestra tierra, la Serranita.

Las tres burgers ganadoras ¿qué te parecen los ingredientes?

No lo debimos de hacer del todo mal porque nuestras dos pequeñas quedaron en segunda y tercera posición y brindaremos por los chicos de Goiko con las dos buenísimas botellas de ron Santa Teresa que ganamos como premio. La primera posición fue para nuestro amigo Luisete, que imaginó una burger de lo más rockera, combinando la carne con mantequilla de cacahuete, plátano frito y bacon.

La Elvis de Luisete con mantequilla de cacahuete, plátano frito y bacon.

Lo mejor vino cuando los tres ganadores nos metimos en la cocina a intentar ayudar a Luis a preparar su hamburguesa Elvis - que pronto estará en la carta de Goiko Grill para que todos podáis probarla si os va la marcha - mientra el resto de asistentes lo veía en sus pantallas para después zampársela.

Sin duda alguna, el primer #GoikoAniversario fue una verdadera fiesta de la hamburguesa y una celebración de un año lleno de éxitos que estamos seguros de que se repetirá en 2014. Desde aquí, damos las gracias a los chicos de Goiko Grill por invitarnos y les deseamos lo mejor de lo mejor.
Puedes saborear una rica hamburguesa en Goiko Grill en la calle María de Molina, 16

jueves, 6 de febrero de 2014

TATE'S MONTECARMELO: Aires renovados y hamburguesas en las que no dejarse el sueldo.

Cuando nos enteramos de que Tate's había renovado su local de Montecarmelo no pensábamos en otra cosa que acercarnos cuanto antes a ver qué sorpresas nos tenían preparadas por allí. Ya sabéis que hace un tiempo estuvimos en su sucursal de la céntrica calle Alonso Cano y que salimos muy contentos de la visita, así que nos plantamos en esta zona de Madrid con el objetivo habitual de zamparnos una buena hamburguesa.



La verdad es que no íbamos con grandes expectativas, ya que el espacio de Alonso Cano no nos convence demasiado y puede pecar de ser demasiado estridente con tanto tono rojo y espíritu deportivo. Sin embargo, y a pesar de ser un día de invierno lluvioso y tristón, nos llevamos una gran sorpresa al ver que nos encontramos con un local no sólo divertido y con un toque canalla, sino acogedor y cálido.


Nos gusta mucho el rollo automovilístico y la combinación de colores del rojo, negro y provenzal y nos alegra ver que esta estética va a respetarse en otros locales de Tate's, como el próximo en inaugurarse en San Sebastián de los Reyes.

La entrada del local de Tate's en Montecarmelo.

La nueva estética de Tate's nos mola.

La noche de viernes estaba lenta pero conforme se fueron acercando las 10 de la noche, el local se llenó hasta un punto que creemos que sería conveniente que reservaseis si al final os decidís a pasaros por allí. No temáis por el servicio aunque esté de bote en bote, porque la verdad es que no podemos poner ninguna queja al trato que recibimos y, además de estar atentísimos, fueron muy eficaces en todo.

Al abrir la carta nos dimos cuenta de que el diseño ha cambiado completamente y de que podemos encontrar novedades hamburgueseras interesantes, así como una amplia variedad de ensaladas y entrantes y un menú degustación que vimos cómo se zampaba la mesa de al lado bastante interesante para costar menos de 10 euros. Podéis consultar su nuevo menú entero pinchando aquí.

Gran variedad de hamburguesas, ¡difícil elección!
Pero vamos a lo importante, y ya os avisamos que en esta ocasión nos pusimos las botas. No es que nos encante comer (que ya sabéis que sí), es que en Tate's las raciones son más que generosas para los precios que se están pagando y no nos pudimos contener ante lo que se nos ponía delante de nuestros ojos.

Para empezar, con el ánimo de probar el máximo posible de platos, nos decantamos por pedir un Súper-Combo, compuesto por alitas de pollo, fingers, aros de cebolla, patatas fritas, nachos con queso cheddar fundido, dados de tomate natural, salsa de yougurt y guacamole. En la foto podéis ver el tamaño descomunal de este plato, por lo que desde aquí os recomendamos que si os decidís a pedirlo, no seáis brutos y no hagáis como nosotros, ordenadlo si sois al menos 4 personas porque sino podéis salir rodando.

Súper Combo: nachos, alitas, fingers, aros de cebolla y patatas fritas.
Sin duda alguna, lo que más nos gustaron del combo fueron los fingers de pollo y los aros de cebolla, ambos muy bien fritos y poco aceitosos. Nosotros recomendaríamos que no se incluyesen patatas fritas, más que nada porque son las mismas que las de las hamburguesas y quizás así se repiten demasiado... En cuanto a las alitas de pollo, nos parecieron algo secas y probaríamos a cocinarlas un poquitín menos.

Imaginaos después de semejante platazo, nos tocó sacrificarnos y dedicarnos a las hamburguesas pero la verdad es que no nos costó apenas nada cuando nos trajeron los platos a la mesa. Ya podéis ver que se han renovado y ahora sirven las burgers en estas tablitas tan monas, que nos encantaron.

La nueva presentación de las hamburguesas.
En esta ocasión nos decantamos por probar una de las nuevas incorporaciones en la carta, la Hamburguesa Rústica de 200 gramos de carne de cebón, que nos llamaba a gritos por ser diferente a las demás e incorporar un pan de artesano con semillas que nos pareció muy interesante.

Hamburguesa Rústica: 200 gramos de cebón a la parrilla, bacon, queso, pimiento rojo, pimiento verde, cebolla pochada, salsa especial Tate's en pan artesano.
Ya os contamos cuando visitamos el Tate's de Chamberí, que nos enamoramos del mollete antequerano bien tostadito que acompaña a la mayoría de las hamburguesas, así que decidimos comprobar que todo sigue igual de estupendo pidiendo una Super Tate's. Aunque puede parecer que se queda algo grande para esta burger (también de 200 gramos), a nosotros este pan nos sigue gustando mucho y os confirmamos que sigue aguantando cualquier salsa que le echen.

Hamburguesa Súper Tate's: 200 gramos de ternera a la parrilla, queso, bacon, canónigos, cebolla, tomate y mayonesa.
Esta vez pudimos probar dos de los tipos de carnes de la carta, la de cebón y la de ternera, y no sabríamos por cuál decidirnos. Esta carne de la Sierra de Guadarrama nos parece fresca y estupendamente cocinada como a nosotros nos gusta, así que no podemos ponerle ninguna pega. Aún así, nos quedamos con las ganas de hincarle el diente a opciones tan interesantes como la hamburguesa de Roastbeef o a la Súper foie de pato, que combina el foie dentro de la propia carne de ternera. Parece que tendremos que repetir...

El resto de ingredientes de las hamburguesas combinan a la perfección con la carne y, además, pudimos comprobar que han reducido la cantidad de salsas en la burger respecto a nuestra primera visita, pudiendo así distinguir el sabor a parrilla un poco más.

Lo único que no nos convence es que, aunque han modificado la forma de presentación poniéndolas en una cestita, las patatas fritas siguen siendo congeladas y esto no tiene perdón de dios cuando una hamburguesa está rica.

Con ganas de morir de sobredosis de comida, pedimos un Combo Dulce compuesto por 3 cookies templadas con helado de vainilla y tres mini brownies con sirope de chocolate. Aunque la última vez no salimos muy contentos con el postre, aquí os reconocemos que estas cookies se nos quedaron hasta cortas porque estaban realmente buenas.

Combo Dulce: cookies, helado y brownie.
En resumen, en esta segunda visita a Tate's nos han terminado de convencer no sólo porque nos mantenemos firmes en que (a pesar de que hay detalles que mejorar) se pueden comer hamburguesas de calidad sin tener que rascarse excesivamente el bolsillo, sino porque la nueva estética que están trasladando al resto de locales da ganas de quedarse un ratito más en ellos a disfrutar en buena compañía.

¿Alguno de vosotros ha ido ya a alguno de los locales de Tate's? ¿qué os ha parecido? ¡ansiosos por leer vuestros comentarios!

PRECIO DESGLOSADO DE LA VISITA:

1 SÚPER COMBO: 10,90€
1 HAMBURGUESA SÚPER TATES: 7,90€
1 HAMBURGUESA RÚSTICA: 8,50€
1 COMO DULCE: 4,90€
2 DOBLES DE CERVEZA: 4€

PRECIO POR PERSONA: 18€


Puedes encontrar el Tate's de Montecarmelo en la Avenida Monasterio del Escorial, 26